viernes, 29 de diciembre de 2006

Lo más de lo más


Lo más de lo más. Lo más cutre entre lo cutre. Lo más ridículo y estúpido. Enciendo el televisor y me encuentro con algo totalmente esperpéntico, digno de las mejores novelas de Valle Inclán. En el programa Dónde estás corazón -que se emite los viernes en Antena 3- le están entrevistando a Isabel Gemio, ahora periodista radiofónica, y la oigo poner a bajar de un burro a los programas del corazón. Nada más paradójico.

Y es que la presentadora extremeña está realizando una crítica feroz al mundo del colorín -curiosamente, no sé si se ha dado cuenta, pero está en un programa de esos haciendo promoción. O sea, que para esto no deben de ser tan malos-. Aún más patético me parece ver cómo los contertulios intenten hacer una defensa a la desesperada de su mundillo podrido, de sus entrevistas y de su ética. Tiene narices también la cosa.

La Gemio -como se la suele llamar- como colmo de los colmos reconoce que ella en su programa de Onda Cero a veces entrevista a personajes del corazón. La muy hipócrita se permite el lujo de disertar sobre lo bueno y lo malo, sobre lo terrenal y lo divino, sobre la fama y el éxito. Y es que hay que tener poca vergüenza cuando uno critica y luego utiliza a los medios para hacer campaña -lo cual es respetabilísimo- sobre la enfermedad de su hijo. Pero hay que ser consecuente.


Tiene todo el derecho a criticarlos y rechazarlos pero no es de recibo que vaya a su casa a insultarlos. Que predique con el ejemplo.

sábado, 23 de diciembre de 2006

Más de lo mismo


Apenas queda un día para Nochebuena -parece ser que una de las noches del año en la que más se ve la televisión- y la programación va a ser un calco exacto de la del año pasado, es decir, lo que voy a ver mañana ya lo he visto los últimos 23 años de mi vida. Y me pregunto, ¿es que no hay nadie al que se le puedan ocurrir ideas un poco más originales?


Después del tipiquísimo mensaje navideño del Rey -que, para asombro de cualquiera dada su interminable verborrea es uno de los momentos más vistos del año- llega Raphael -cómo no- cantándonos sus mayores éxitos, los villancicos, acompañado de otras viejas glorias que cantan a la Navidad.

Me parece fenomenal que se apueste por actuaciones musicales pero es que ya me canso un poquito de ver todos los años exactamente lo mismito. Ya es hora de que nos oferten programas un poco más variados -no digo que el show de Raphael no sea de calidad, sino que, año tras año las mismas caras y las mismas actuaciones, se hacen pesaditas-. Ya veremos qué nos ofrecen en Nochevieja, aunque me temo que no pasaremos de los típicos cotillones horteras en los que salen cuatro petardos riéndose y con la copita de champán.

Luego dicen que es la noche del año en la que más se sale. Cómo no. A ver quién es el valiente que se atreve a quedarse en casa a ver tanta estupidez. Lo veremos en tan sólo 8 días.

domingo, 17 de diciembre de 2006

Hasta en la sopa


Hasta en la mismísima sopa. Y nunca mejor dicho. Aquí hay tomate -programa cutre donde los haya y que goza del beneplácito del público- ahora se va a emitir incluso los sábados bajo el título El tomate weekend. Alucinante. Y es que ya no saben qué sacar.

Resulta que los ejecutivos de Telecinco se han planteado cómo batir récords de audiencia en las sobremesas del fin de semana y no se les ha ocurrido mejor idea que hacer una versión del tomate, en la que se vendían como novedades la indecente toma de pelo a una anciana que no entendía inglés. Me parto y me mondo de risa con estas cosas -como diría Paco León, "el Luisma" en la excelente serie Aída-.
De todas formas, no sé qué es peor: si este programa o esos telefilmes de dudosa calidad que en estas fechas, por si fuera poco, narran historias inenarrables -valga la redundancia- sobre la Navidad. Infumables.
Y yo me pregunto, ¿por qué no se ha pensado en emitir Caiga quien caiga u otro programa un poquito -tampoco pide mucho más- más interesante y por qué siempre se recurre a los mismos bodrios? Además, se corre el riesgo de quemar el producto, como diría Risto Mejide.

Ya veremos lo que dura en antena.

martes, 12 de diciembre de 2006

La empanadilla de Martes y Trece



La famosa empanadilla de Martes y Trece -aquel maravilloso sketch que nos sigue robando una sonrisa cada que lo vemos, aunque lo hayamos visto millones de veces- resulta que es uno de los momentos estelares, según los españoles, de la historia de la televisión en nuestro país.
Al parecer, el programa "La imagen de tu vida" -que indaga en el archivo de RTVE y que rescata las mejores imágenes de este medio siglo de vida de la televisión- ha sido un rotundo éxito de audiencia. Este espacio trata de aprovechar el magnífico y, por otra parte amplísimo archivo televisivo. En dos programas especiales se rescatarán del olvido los momentos más recordados y aplaudidos de estra caja de luz.
Éste es, sin duda, uno más de los actos previstos para celebrar este especial cumpleaños de la caja tonta, entre los que se debemos destacar la fabulosa gala de conmemoración de los 50 años de televisión emitida este fin de semana donde lo más destacado fueron las actuaciones estelares de artistas del presente cantando gracias a las nuevas tecnologías a dúo con viejas glorias del panoramaa artístico ya fallecidas. Todo un éxito, vaya, que además tuvo elevados índices de audiencia.

El fenómeno Risto

La que se ha organizado con este tipo -Risto Mejide para los amigos-. Resulta que si algún estadio nos quedaba para rozar lo ridículo y lo surrealista, este publicitario de 31 años lo ha conseguido y sin mucho esfuerzo. La clave de su éxito se basa en los malos modos, en llevar unas gafas de sol en el programa de OT cuando participa como jurado -cosa, por cierto, de bastante mala educación y de dudoso gusto- y gracias a sus ya archiconocidas frases célebres tales como "eres un producto y no estás en operación cachas" o "eres un hortera,estra edición echaba en falta a un hortera y gracias a tí me quedo tranquilo. No estás nominado. Estás nominadísimo". Menudas perlitas.
Lo que más me llama la atención es que este sujeto, que no concede entrevistas y nomina a los concursantes cruelmente -se ha llegado a dudar que se trate de un papel-, parece ser que, a parte de subir la audiencia como la espuma cada vez que aparece, es el creador de la campaña publicitaria de BMW de Bruce Lee -todo un crack-. En fin, que este sujeto tan antipático se ha convertido en aquello que él exige a los triunfitos: un producto. Y yo me pregunto: ¿Cómo puede ser que semejante elemento se haya convertido en más importante que el propio programa? Quién sabe...

lunes, 11 de diciembre de 2006

Un día muy especial


Ayer, 10 de diciembre, se celebró el Día Internacional de la Radio y de la Televisión. Se trata pues de un momento idóneo para reflexionar sobre la situación en la que se encuentran los medios audiovisuales, especialmente nuestra querida caja tonta.
En este sentido, no podemos dejar de analizar y sorprendernos por todo lo que ha cambiado la caja de luz desde que comenzasen sus primeras emisiones. Hemos llegado a límites insospechados o si no, ¿quién suponía que se televisaría la llegada del hombre a la luna?, ¿quién pensaba que se llegasen a encerrar 10 personas en una casa llena de cámaras de televisión? o ¿quién podría haber imaginado que se televisaría en directo el mayor ataque terrorista de la historia? Increíble, ¿no es cierto?
La Unión Europea, con motivo de la celebración internacional de este día, ha hecho balance de la trayectoria de la televisión y, como consecuencia, ha anunciado que exigirá que todos los estados miembros dispongan de una autoridad televisiva competente e independiente que ayudará, a su vez, a renovar la directiva de Televisión Sin Fronteras. Además, pretende regular los límites de la publicidad -por cierto, lo que faltaba, porque tienen la intención de aumentar los minutos mínimos permitidos para emitirla. Loable iniciativa que veremos si llega a buen puerto.

Artículo relacionado: El correo digital

jueves, 7 de diciembre de 2006

Antena 3 es merengue

Me sorprende todo lo que se les ve el plumero a ciertas cadenas de televisión -y hablo de Antena 3-. Cada vez que enciendo el televisor y veo este telediario -ya sea la edición de la mañana, la tarde o de la noche- siempre se abre la sección de deportes con el fútbol -deporte rey por excelencia de este país aunque desde aquí recuerdo que hay vida después de él- y especialmente con el Real Madrid.
Al principio pensé que se trataba de una mera coincidencia. Más tarde me incliné por deducir que quizá se emitiese tanto merengue porque era el equipo que más aficionados tenía en el territorio nacional. Pero es que ha llegado un momento en el que, ocurra lo que ocurra en el panorama deportivo, siempre se busca la imagen del Real Madrid. Es más, en ocasiones, frente a otro logro deportivo -como puede ser una buena clasificación de un tenista español- me atrevo a decir que se siguen concediendo más minutos a los merengues, sin olvidar que en las informaciones referentes a la liga española parace que no juegan más equipos. El Athletic sólo aparece un par de minutos si juega contra los blancos.
Aceptemos que, en efecto, el Real Madrid suscita cierto interés. Comprendo que cada cadena suele abrir sus espacios deportivos con las informaciones referentes a los eventos que televisa -Telecinco nunca abrirá con la Champions si puede hacerlo con la Fórmula 1-. Dejando de un lado los intereses comerciales, lo que no es de recibo es que no se tengan en cuenta elementos de evaluación periodísticos como la relevancia de la información. Debería primar un poco más el rigor periodístico y valorar las noticias más importantes del día dejando en un segundo plano los intereses publicitarios y de retroalimentación de las cadenas. Dicho queda.